“De dónde sacamos la loca idea, que para que un niño se porte bien, primero tenemos que hacerlo sentir mal” Jane Nelsen
La Disciplina Positiva te ofrece la oportunidad de crear lazos sanos con tus hijos e hijas, tomar una mayor consciencia de tu influencia y que ésta sea lo más positiva posible.
La Disciplina Positiva es una metodología creada por Jane Nelsen y Lynn Lott en los años 70 para poder dar respuesta a las necesidades de madres y padres que no querían basar su crianza en gritar o en abandonar porque no podían más.
Ellas dos, desarrollaron la metodología de Disciplina Positiva a partir de los estudios del psicólogo austriaco Alfred Adler y los textos de su discípulo Rudolf Dreikus.
Esta corriente psicológica en la que se apoya la Disciplina Positiva, entiende a la persona como si fuese un iceberg, es decir, el comportamiento tan solo es la parte visible de lo que realmente le sucede a la persona. Y ese comportamiento tiene un por qué y para qué: pertenecer.
Cuando los niños y niñas sienten que no pertenecen, se sienten mal, aparecen los malos comportamientos y es ahí cuando el adulto debe observar y entender las necesidades y sentimientos que se esconden en esa parte sumergida del iceberg.
Utilizar la disciplina positiva es una manera sencilla de empezar o seguir con tu propósito de una crianza respetuosa, basada en las relaciones horizontales, donde el niño y el adulto tienen su plano de interacción claro.
Respeto por ti como madre o padre y respeto por ellos.
Aprenderás 52 herramientas súper útiles para tu día a día que te ofrecen un nuevo marco de comunicación e interacción con tus hijos e hijas.
Con la asesoría de Disciplina Positiva 1-1 serás tú mismo/a quién marque el tiempo de aprendizaje para todo este proceso de entendimiento y decodificación de las necesidades y sentimientos ocultos en los comportamientos de tus hijos e hijas y, sobre todo, de qué manera es la más eficiente en tu familia para que esta metodología funcione.
Con la asesoría de Disciplina Positiva…
A través de una asesoría 1-1 descubrirás todas las claves que necesitas para salir de esos viejos patrones que tanto te incomodan.
Castigar, amenazar o incluso realizar ciertas acciones violentas que nos llevan a una culpa muy profunda, no van a ayudarte en tu crianza.
Saber y conocer la Disciplina Positiva, te va a abrir un abanico de nuevas opciones de crianza que se basen en la responsabilidad, en la cooperación y el entendimiento mutuo.
Los buenos tratos son avalados por la comunidad científica, y además, si de algo nos podemos sentir orgullosos nuestra generación, es por tomar consciencia de que todos nuestros actos y palabras influyen en nuestros hijos e hijas de alguna manera.
Evidentemente, la Disciplina Positiva no te va a hacer un padre o una madre perfecto, pero sinceramente, esto no es lo que necesitan nuestros hijos e hijas.
La Disciplina Positiva, te va a ofrecer la posibilidad de mostrarte como una persona accesible, que comete errores y que opta por solucionar los problemas en vez de buscar culpables.
La Disciplina Positiva ofrecerá a tus hijos e hijas la oportunidad de entender que todos los miembros de la familia sois iguales, y al mismo tiempo, tú como madre o padre debes cuidar que dentro de los límites del amor y el respeto se produzca, de la manera más sana, su desarrollo.
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